El joven centrocampista del Atlético de Madrid gusta en Martiricos y ya se han establecidos los primeros contactos para su cesión.
Justo cuando queda un mes para que se abra el mercado invernal, el Málaga sigue a la caza y captura de refuerzos para que lleguen lo antes posible a Martiricos y para que puedan sumar desde el primer minuto en la plantilla de Bernd Schuster. Pese a que el club tiene las ideas relativamente claras en los puestos que quiere reforzar y el perfil de jugador que necesita, en los despachos de La Rosaleda no descartan ninguna posibilidad y aunque se buscan jugadores contrastados y con peso en el equipo, también se requiere que conozcan la Liga y que vengan rodados. Y ahí entran en escena las posibles cesiones de los tres grandes equipos de la Liga con sus jóvenes valores del futuro.
El Málaga ya ha intentado pescar sin éxito en la casa blanca, donde Jesé, Morata o Casemiro ahora mismo no saldrán de ninguna de las maneras. En el Barcelona tampoco hay mucho donde poder elegir por las rotaciones del Tata y las lesiones que ahora mismo asolan al conjunto azulgrana. Pero en el Atlético está la figura del joven Óliver Torres, que juega en la posición que demanda el club, que conoce la Liga española y dada su situación podría salir en busca de más rodaje.
El talentoso centrocampista, que tiene calidad a raudales y es una de las estrellas nacionales del futuro, gusta en Martiricos y desde el club blanquiazul ya han preguntado al conjunto colchonero por una posible cesión. De momento la operación está muy verde porque Óliver está entrando en los planes de Simeone a cuenta gotas y porque el técnico argentino del Atlético lo considera su ojito derecho. El argentino lo mima mucho en cada entrenamiento y cuida hasta el milímetro cada aparición del canterano.
Así, las opciones de que la operación salga a flote son sumamente complejas, como sucede en este tipo de cesiones en el mercado invernal. Y es que Torres está gozando de un leve protagonismo en el Atlético de Madrid. Hasta la fecha ha jugado 9 partidos con la elástica rojiblanca repartidos en 5 duelos de Liga, 3 de Champions y uno en la Supercopa con un total de 252 minutos. Ayer, en la victoria colchonera en Elche, el canterano no estaba ni convocado. Algo por otra parte habitual.
Su llegada al Málaga podría servirle al jugador para foguearse y también al conjunto blanquiazul, que necesita materia gris en su centro del campo. La evidente falta de calidad que tiene el equipo malaguista en los últimos metros es un hándicap difícil de superar. Y Óliver Torres puede cubrir esas carencias a la perfección.
El nombre de Óliver Torres ya fue vinculado con el Málaga durante el pasado mercado veraniego, pero los contactos no llegaron a fructificar. Pese a que hay otras prioridades, en el club no dejan de lado cualquier opción.
Una posibilidad que tiene varias aristas ya que el Atlético también podría ceder a Leo Baptistao al Rayo Vallecano. E incluso el conjunto rayista ha preguntado por el joven Torres. No es el único equipo que quiere a Óliver cedido.
Justo cuando queda un mes para que se abra el mercado invernal, el Málaga sigue a la caza y captura de refuerzos para que lleguen lo antes posible a Martiricos y para que puedan sumar desde el primer minuto en la plantilla de Bernd Schuster. Pese a que el club tiene las ideas relativamente claras en los puestos que quiere reforzar y el perfil de jugador que necesita, en los despachos de La Rosaleda no descartan ninguna posibilidad y aunque se buscan jugadores contrastados y con peso en el equipo, también se requiere que conozcan la Liga y que vengan rodados. Y ahí entran en escena las posibles cesiones de los tres grandes equipos de la Liga con sus jóvenes valores del futuro.
El Málaga ya ha intentado pescar sin éxito en la casa blanca, donde Jesé, Morata o Casemiro ahora mismo no saldrán de ninguna de las maneras. En el Barcelona tampoco hay mucho donde poder elegir por las rotaciones del Tata y las lesiones que ahora mismo asolan al conjunto azulgrana. Pero en el Atlético está la figura del joven Óliver Torres, que juega en la posición que demanda el club, que conoce la Liga española y dada su situación podría salir en busca de más rodaje.
El talentoso centrocampista, que tiene calidad a raudales y es una de las estrellas nacionales del futuro, gusta en Martiricos y desde el club blanquiazul ya han preguntado al conjunto colchonero por una posible cesión. De momento la operación está muy verde porque Óliver está entrando en los planes de Simeone a cuenta gotas y porque el técnico argentino del Atlético lo considera su ojito derecho. El argentino lo mima mucho en cada entrenamiento y cuida hasta el milímetro cada aparición del canterano.
Así, las opciones de que la operación salga a flote son sumamente complejas, como sucede en este tipo de cesiones en el mercado invernal. Y es que Torres está gozando de un leve protagonismo en el Atlético de Madrid. Hasta la fecha ha jugado 9 partidos con la elástica rojiblanca repartidos en 5 duelos de Liga, 3 de Champions y uno en la Supercopa con un total de 252 minutos. Ayer, en la victoria colchonera en Elche, el canterano no estaba ni convocado. Algo por otra parte habitual.
Su llegada al Málaga podría servirle al jugador para foguearse y también al conjunto blanquiazul, que necesita materia gris en su centro del campo. La evidente falta de calidad que tiene el equipo malaguista en los últimos metros es un hándicap difícil de superar. Y Óliver Torres puede cubrir esas carencias a la perfección.
El nombre de Óliver Torres ya fue vinculado con el Málaga durante el pasado mercado veraniego, pero los contactos no llegaron a fructificar. Pese a que hay otras prioridades, en el club no dejan de lado cualquier opción.
Una posibilidad que tiene varias aristas ya que el Atlético también podría ceder a Leo Baptistao al Rayo Vallecano. E incluso el conjunto rayista ha preguntado por el joven Torres. No es el único equipo que quiere a Óliver cedido.
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