El capitán del Málaga CF está a punto de cumplir 300 partidos de malaguista, pero se muestra inconformista por naturaleza – Duda ejerce de veterano en una plantilla sumamente joven y aboga por mirar a Europa sin tapujos.
Confía en el trabajo, habla de su futuro incluso fuera de los campos, apuesta por la continuidad de Gracia y Amrabat, y tiene un sueño por cumplir al que no le pone fecha de caducidad.
No hay ningún malaguista que se precie que no conozca la figura de Sergio Paulo Barbosa Valente «Duda» (Oporto, Portugal, 27 de junio de 1980). El luso es historia viva del club con sus casi 300 partidos de malaguista, el que más. Y por eso sus palabras tienen un calado especial. Suma dos jornadas sin saltar al césped, sin calzarse las botas y sin sentir en su piel la adrenalina de competir al máximo, pero no por ello deja de ser un actor importante en este Málaga. Duda ejerce de veterano dentro y fuera del vestuario. Y aunque tiene contrato hasta 2016, a nadie se le escapa que en el futuro será parte activa del club.
¿Qué le queda a Duda por hacer como futbolista?
Bueno, creo que prácticamente lo he hecho todo. Pero sí me gustaría haber jugado una final con el Málaga, que no ha sido posible. Este año estuvimos cerca, luchamos para estar ahí en la Copa, pero bueno... Esperemos que sea el año que viene.
34 años, casi 300 partidos de malaguista... ¿Se sigue sintiendo útil en este equipo?
Sí. Creo que el día que sienta que no soy útil me iré para mi casa. A día de hoy estoy contento, están contentos conmigo y a seguir trabajando para convencer al míster cada jornada.
Se habla mucho de este Málaga por los jóvenes y del gran futuro que se les augura. Pero en el plantel hay dos de los jugadores que más partidos han jugado en la historia del club como Weligton y usted. ¿Reclaman su cuota de protagonismo?
No, creo que no tenemos que mirar si somos más veteranos que otros para jugar. Aquí nos sentimos importantes todos y a la hora de jugar pues el míster tiene el voto de decidir quién juega. Pero nosotros tenemos que seguir trabajando, demostrar a los jóvenes que aunque tengamos muchos años de carrera tenemos que trabajar para luchar por un puesto.
Pero al menos esa veteranía debería infundir respeto...
Sí, eso está claro. Nosotros estamos aquí porque hemos trabajado mucho, nadie nos ha regalado nada. Estamos demostrando día a día que seguimos siendo válidos.
¿Se considera un jugador de leyenda blanquiazul?
No, me siento un como un jugador más de la plantilla.
Se da por hecha su continuidad. En principio tiene contrato hasta 2016...
Sí, no hemos hablado nada nuevo. Mi esperanza y lo que tengo en la cabeza es seguir este año y el año que viene. Y luego ya se verá. Tengo contrato firmado hasta el año que viene, de momento no me preocupa.
Suma varias semanas sin jugar. ¿Cómo se ve a este Málaga desde dentro, pero con esa cierta distancia?
Sí, sabemos que es un equipo joven y con ganas de comerse el mundo. Y lo están demostrando. Creo que el equipo está haciendo un grandísimo trabajo y ponen las cosas difíciles. Eso es lo importante de una plantilla, que todos quieren jugar. Ahora les está tocando a otros y bueno, sólo queda trabajar.
Se lo toma como un relevo natural, ¿no?
Sí, es importante para nosotros. Tenemos una plantilla muy joven y si no dan la cara sería difícil. Pero estamos haciendo una gran temporada y creo que seguiremos por esa misma línea.
Volviendo a la actualidad, ¿está este Málaga preparado para jugar y competir en Europa?
Creo que ahora hay que pensar en el día a día. Estamos en una posición muy bonita, trabajando y jugando bien. Quedan muchos partidos y cada partido va a ser una final. No va a ser nada fácil, pero estamos demostrando que podemos y va a depender sólo de nosotros estar ahí al final.
¿Le gustaría volver a Europa con el Málaga?
Por supuesto que sí. El objetivo de todos los jugadores es jugar en un club que esté en Europa. Pero hay que pensar en el día a día.
¿Cree que Europa le debe algo al Málaga?
Uno piensa que nos quitaron algo gordo hace dos años, pero las cosas se consiguen con el trabajo hecho y nosotros no pudimos conseguir pasar de cuartos. Fue injusto, pero a lo mejor el año que viene estamos en Europa.
Usted ya vivió un caso similar al de este curso con Tapia en el banquillo. ¿Aquella ocasión parece bien diferente a ésta?
Yo creo que no tiene nada que ver. Son temporadas completamente distintas. El año de Tapia no era un año para hablar de Europa, era una posibilidad pero no se hablaba. Pero ahora se habla más fuerte de esa posibilidad, sobre todo porque aún está reciente la última vez que jugamos. Además, el club parece que está más preparado que entonces. Es otra disciplina en la entidad. Es una posibilidad que tenemos y ahora todo el mundo quiere. Y nosotros por supuesto que también queremos entrar en Europa.
Llegados a este punto, ¿cuál es el rival del Málaga, el Villarreal o el Athletic de Bilbao?
Yo no miraría a los rivales. Nosotros tenemos que seguir nuestro trabajo, seguir el día a día, seguir luchando y luego al final el fútbol pone a cada uno en su posición. Tengo claro que si hacemos las cosas bien hechas vamos a estar ahí, es imposible que nos la quiten. Por eso yo creo que debemos mirarnos a nosotros mismos y corregir lo que hagamos mal.
Ahora toca Vallecas, un campo que no se le da demasiado bien al Málaga...
Sí, van a ser partidos difíciles de aquí al final porque nosotros queremos entrar en Europa y habrá equipos que quieran salir del descenso o jugándose la Liga. Son todo finales para nosotros.
Precisamente en un campo tan pequeño premian las accione a balón parado. Sin embargo, el Málaga sólo ha marcado esta temporada dos goles a balón parado y uno de ellos lo hizo usted. ¿A qué se debe esta deficiencia en esa parcela del juego blanquiazul?
Este año es el que más trabajamos esa faceta y sin embargo no nos sale. Creo que el fútbol te da siempre cosas y seguro que de aquí al final nos va a dar muchas y una de ellas puede ser los goles a balón parado.
Pero no deja de ser curioso entonces porque es cierto que se presuponía que Javi Gracia explotaba mucho esa faceta...
Sí, los rivales también nos vigilan más. Pero no es fácil.
¿Después de su larga experiencia como futbolista, qué consejos le daría a los jóvenes?
Bueno, ellos son jóvenes pero llevan mucho fútbol en sus piernas. Ellos saben que el fútbol no es fácil, que la puerta para entrar es muy estrecha pero que para salir es muy ancha. Ellos saben que trabajando el día a día llegarán lejos, pero que si bajan el pistón se pueden perder todo en poco tiempo.
Dos nombres propios. El primero es el de Javi Gracia. El míster se ha granjeado un importante caché con su año en el Málaga. ¿Si estuviera en su mano, blindaría al míster?
Creo que la plantilla este año ha demostrado por qué está en ese puesto. Creo que a día de hoy la plantilla y el entrenador son los puntos fuertes de este grupo y sería malo para nosotros que alguien se fuera. Tenemos claro que el Málaga necesita vender, pero hay que hacer esfuerzos por algunos componentes de la plantilla. Y uno de ellos podría ser el entrenador.
Y el segundo nombre es el de Amrabat. El debate está en la calle y se lo traslado también a usted. ¿Ejercería la opción de compra por él?
Sí, creo que a día de hoy no dejaba salir a nadie. Y lo que haría sería comprar para mejorar lo que tenemos, que no es fácil. Si el club necesita vender para comprar a Amrabat pues a lo mejor decía que no, pero si el club tiene la posibilidad y tiene ese dinero, yo lo compraría porque es un jugador muy importante en la plantilla.
En varias ocasiones ha comentado que no suele ver fútbol más allá del Málaga. ¿Eso quiere decir que no le veremos en los banquillos en el futuro?
No, no digo que no vaya a estar en el futuro pero pienso en el día a día y ahora sólo pienso en el grupo. El futuro ya se verá.
¿Y en el club, le gustaría seguir cuando cuelgue las botas algún día?
Bueno, a lo mejor estaré trabajando para el club en el futuro, pero no sé al punto que puedo llegar o no de estar en un banquilllo. Yo puedo pensar ahora mismo en seguir disfrutando.
Suma 12 temporadas en el Málaga CF. ¿Hasta cuanto durará la cuerda de Duda?
La verdad es que no lo sé, a día de hoy me siento bien y con ganas. Y como he dicho antes, cuando no me quieran me iré para mi casa.
Por lo visto, después de mucho insistirle sus más cercanos ha entrado en el mundo de las redes sociales.
Bien (risas). Está bien para charlar con los amigos. Además puedo recibir el cariño de la afición. En una semana han sido demasiados mensajes, pero contento de también estar ahí. No creo que llegue a ser tan activos como otros, tanto no quiero (risas).
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